MADISON
para Erin Teskten
Uno
entra en la lluvia como en una historia de relojes y cuervos.
Reales
como el frío sobre las lámparas
vemos
de madrugada sus banderas en la ciudad que ignora
cómo
cierras los párpados cuando te azota el viento,
cómo pronuncias las palabras de golpe
aprendidas.
Uno
lejos de todos los espejos
se
observa en las ventanas de autos y vitrinas.
Uno
recuerda una calle, una casa ,una mujer enferma
una
ventana abierta que nadie cierra donde las botellas vacías
se
reúnen entre las manos de los amigos muertos.
Uno
no es uno entre tantas preguntas ciertas.
Ella
recuerda las manos de su tío árbol de tamarindo,
recuerda
los días como el agua entre sus piernas,
recuerda
sus primeras lluvias, la cama de cuatro, las manos oscuras.
Hay
remolinos eléctricos que barren las hojas,
monedas
en el aire de una ciudad no aprendida
por
las horas a la deriva por la sal en los ojos y el hambre.
Uno
acostumbrado al día se levanta,
y
encuentra que la nieve bebe la sangre de una conejo herido.
Uno
encuentra la vida y las cosas
como
ese pequeño arco iris de aceite en la banqueta.
MADISON
para Erin Teskten
We
step in the rain
like
into a short story of crows and clocks,
real
like cold over the streetlamps.
We
see the flags of rain in the city that ignores
how
you close your eyes when wind strikes,
how
you say words suddenly learned.
Away
from mirrors we
find
ourselves in the reflection of car
windows and displays.
We
remember a street, a house, a sick mother.
We
remember an open window that no one closes
where
empty blottles gather among the hands of dead friends.
We
are not the same among many certain questions.
You
remember your uncle’s hands
like
a tamarind tree.
You
remember days as the water between your legs.
You
remember your first rains,
a
bed shared by four, shadow hands.
There
are electric whirlpools
sweeping leaves,
coins
in the air of an unkown city,
the
hours wandering,
hunger
and salt burning our eyes.
We
are used to days like these,
wake
up to find that the snow
drinks
from the blood of a wounded rabbit.
We
find life and things like that small rainbow
of
car oil on the sidewalk.
No comments:
Post a Comment